Una centenaria vivienda unifamiliar de 3 alturas en pleno corazón del antiguo que se encontraba en estado de abandono transformada en una agradable vivienda luminosa y alegre. Una única estancia de salón comedor y cocina dan paso al piso superior donde se encuentran las habitaciones. Colores neutros y algún guiño decorativo y de color crean una agradable atmósfera.
En esta reforma se ha prestado especial atención a la iluminación.
Las ventanas ayudan a dar ese calor que hace de una vivienda un hogar. Tanto la ventilación como la iluminación son aspectos primordiales dentro de una casa para su nivel funcional y estético.
En esta vivienda existen distintos tipos de ventanas. Las centrada otorgan luz de mayor intensidad y distribución uniforme, son las que podemos ver en la cocina americana. Las laterales que entregan un menor flujo de luz y se distribuyen por toda la casa para ofrecer una atmósfera agradable y sobre todo sana.
