Para muchas personas no hay nada como la sensación del sol en la cara en la mañana al despertarse, o el sentarse al sol a leer un libro en un día de invierno, lo cierto es que estas sensaciones placenteras tienen más de una explicación científica. Existen muchos estudios que demuestran el efecto del sol y de la luz en los seres humanos, las evidencias muestran que en los días soleados las personas tienden a ser más optimistas, se siente mejor de salud y son más propensas a ayudar a otras personas, en general hace que nuestras sensaciones sean más intensas, mientras que la exposición a la oscuridad o extensos periodos de días nublados, hacen que nuestras sensaciones sean menos intensas.
La cantidad de luz afecta nuestro cerebro y nuestro cuerpo, no solo nos ayuda en la visión sino que también cumple un rol importante en el balance y sincronización de nuestro reloj biológico (ritmo circadiano) que a su vez influencia en nuestro sistema endocrino y la generación de hormonas, es así como cuando la luz es inadecuada nuestro ritmo circadiano se ve afectado, esto puede producir la poca producción de melatonina durante la noche, y con ello afectar nuestro sueño y experimentar problemas al dormir, que a su vez pueden causar cambios en el comportamiento de las personas ya que la falta de sueño afectar el sistema límbico el cual regula las memoria, la atención, la personalidad y la conducta.
Hay muchos estudios que demuestran los beneficios de la luz natural, algunos de de estos beneficios son:
– La luz natural incrementa la productividad en el trabajo, tener un ventana cerca nos pone de buen humor y nos da una sensación de satisfacción además promueve la estimulación mental y visual necesaria que regula nuestro ritmos circadianos.
– Además los espacios con suficiente luz natural, debido a la instalación de ventanas y sensores de luz puede reducir el consumo de energía de un 20 hasta un 60%.
– Es también común que viviendas con poca luz natural o sin ventanas así como oficinas sin suficiente luz natural son arrendadas a menos precio que los que tienen ventanas y más luz natural y que además haya mayor demanda de espacios con mayor iluminación natural.
– A través de diferentes métodos de observación, se ha podido demostrar que las personas compran mas en centros comerciales en lo que hay más luz natural, sea atreves de ventanas, muros cortinas o tragaluces.
– Esta probado que pacientes en hospitales que se encuentran en habitaciones con grandes ventanas que dejan ingresar más luz y hacia aéreas verdes, experimentan un ritmo de recuperación más rápido y necesitan menos analgésicos que los pacientes que tienen ventanas hacia paredes por lo cual ingresa poca luz.
– Existe también una fuerte relación entre la mejora en las calificaciones de estudiantes con la cantidad de luz que ingresa en un salón de clase, las ventanas con vistas a parques o zonas verdes o actividad humana a cierta distancia, hace que los estudiantes aprendan mejor.
Como podemos ver los beneficios de la luz natural van más allá de un nivel psicológico y fisiológico y como, con solo tener un gran ventanal cerca, nuestro día puede cambiar de manera significativa.